sábado

Maquinarias varias y arreglos de guitarra para dormir

Tratando de medir la vuelta
para no descuidarme y caer,
preso de los vicios de un sistema
que nos quiere desaparecer.

Las balizas prendidas al frente,
mi motor sigue rugiendo salvaje,
las balas silban sin alcanzarme,
un navío en el tormentoso oleaje.

Cautivos de la costumbre criminal,
herrumbradas normas de la moral,
viajes sin retorno a la normatividad
juicios y castigos, noción de bien y mal.

Callar es una traición, una calamidad
mas no puedo ni quiero enmudecer
que mi boca diga mis verdades llanas
que nadie me haga empequeñecer.

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