miércoles

Septimo tramo de un viaje a la torre que todo lo sostiene



Los antiguos mitos vuelven
para enseñarnos a enfrentar
las peripecias de un futuro
que no ha de venir todavía.
Los circos abren su función
en medio de la algarabía general
y una nueva farsa nos distrae
de los problemas que importan.
El camino a la torre es arduo
pero ya casi toca a su final,
al fin y al cabo de meses de lecturas
me encuentro en el tramo final
de un viaje a través de tierras extrañas
y me codeo con personajes diversos,
hampones, vampiros y... ¿arañas?
Carrera enloquecida de un tren 
que corre hacia la muerte de una ciudad,
un hechicero que huye en el desierto,
una puerta solitaria en la orilla del mar,
un castillo en ruinas en una vieja ciudad,
todo eso al cuidado de un oso y una tortuga
que descansan en la eterna inmensidad.
El camino ya casi termina y se cierra la rueda.
Largos días y gratas noches señores lectores,
yo me dirijo a ver que mas queda... (¿por leer?)
que mas queda en este mundo por ver.

Ella



Solo ella sabe encender mi fuego secreto
su mano tendida es un faro en mis noches
y su tierno abrazo es la costa prometida
en la que descansan mis sueños mas amados,
un lugar al que llegar después de viajar
por hostiles mares sombríos y solitarios.
un rayo de sol en una mañana de otoño,
una guía y una fuente de amor y amistad.
sus ojos son destellos refulgentes y divinos
y abrazo cada minuto que con ella paso.
su presencia hace palidecer a las estrellas
y su voz hace que las melodías sean mas bellas.
cuanta belleza cabe en una sola persona
que no es mas ni menos que el resto de la gente
pero que nadie en el mundo puede reemplazar.
ella ocupa un lugar privilegiado en mi sentir.
A veces ella no sabe lo que haría por verla feliz,
un amor un poco confuso mas que anido,
que pese a todos los defectos que tiene
no por ese motivo es menos ardiente y decisivo.
A ella y solamente a ella van estas palabras,
como un signo de complicidad que viaja
y a través de largas distancias te va a abrazar.