Platos precolombinos

 

Estas siempre presente en mis recuerdos,

como una referencia que se niega a irse.

Cada paisaje, las calles que recorrimos juntos

y esos pequeños episodios de la vida cotidiana

cuando nos escribíamos mensajes personales

vienen a mi memoria cuando veo las fotos

que me tome el trabajo de guardar de vos.

Esos ojos oscuros que miran a través de la pantalla

y un pelo mas oscuro que la mas profunda noche.

Tal vez nunca pude decírtelo de la forma adecuada

pero formas parte inseparable de mi vida aun,

cuando cierro los ojos es tu cara la que aparece

y ese tono particular de voz cuando me hablabas,

me hacías pensar y sentirme afortunado en verdad.

Cuesta trabajo saber que ya no vas a volver mas,

que lo mejor es dejarte ir y no volverte a llamar mas,

que fuera de mi vida vas a estar mucho mejor

y que el tiempo va a curar el dolor que todavía esta.

Nunca mas volveré a reír a tu lado y la vida seguirá,

seguramente ya ni siquiera pienses en mi hace años

y pensaras que yo ya me olvide de todo eso que paso.

Sos un sueño irrealizado que cada tanto vuelve a mi

para recordarme que fui un tonto por hacer

que no te quede mas remedio que irte de mi vida.

Espero de corazon que donde sea que estés seas feliz

y que puedas leer esta nueva despedida 

mi amada amiga

Resoluciones pendientes y un tiempo precioso para pensar en otras cosas

Desde ese momento supe la verdad oculta de las cosas,

nadie tiene poder sobre lo que siento o lo que pienso,

nadie merece mi tiempo y mis pensamientos mas que yo.

Pase muchos años buscando amistades y querencias

sin darme cuenta de que perdía mi tiempo y energía

calmando la sed de mi alma con agua llena de sal.

Pocas veces tuve fortuna en mi búsqueda insistente

y de esas veces no quedo nada que valga la pena recordar.

Horas y horas perdidas en pos de sueños insulsos y vacíos

que a la hora de la verdad no aportan nada a mi existencia.

No hay porque crear vínculos sociales y afectivos 

porque son la forma de perder energía mas estúpida que existe

y nadie vale tanto como para hacer semejante sacrificio.

Una prueba irrefutable de que todos son interesados

y que utilizamos a las personas hasta que ya no nos sirven

y las tiramos a la basura cuando ya cumplieron su función,

y nos vamos lejos sin siquiera pararnos a mirar para atrás.

Perdí años y años buscando hacer amigos y ser querido

y solo traigo cicatrices que todavía no dejan de sangrar

por gente que se fue de mi vida mas para nunca volver.